jueves, 16 de octubre de 2008

El Paradigma de las Incongruencias

EL PARADIGMA DE LAS INCONGRUENCIAS
O
LAS “PERLITAS” DEL SR. RAJOY

Autor: Geromín

En octubre del pasado año me tomé la libertad de escribir una carta abierta a D. Mariano Rajoy en la que exponía mi opinión personal sobre la situación del partido popular y las posibles consecuencias que podrían derivarse de su permanencia en la presidencia del mismo.
Transcurrido un año, me reafirmo en mis observaciones y, lamentablemente para España, se han cumplido las previsiones apuntadas. No me considero un analista político pero la realidad era tan evidente que cualquier persona podía vaticinar el futuro inmediato.
Durante este periodo de tiempo, el Sr. Rodríguez Zapatero ha vuelto a ganar las elecciones generales, a pesar de sus inmensos y numerosos errores, aprovechándose de un rival carente de carisma y que es incapaz de transmitir ilusión a sus votantes. En los últimos meses, los ciudadanos españoles hemos asistido alucinados a una serie de incongruencias protagonizadas por el líder de la oposición.
En este artículo que, considero complementario a mi carta del pasado año, me ceñiré a las más significativas, pues el relato de todas servirían para llenar las páginas de un libro.

La primera de ellas está relacionada con la preparación y desarrollo del congreso de su propio partido, celebrado el pasado mes de junio, operación que llevó a cabo mediante un control férreo de todos los dirigentes regionales, impidiendo el juego limpio. Estamos hastiados de escuchar hasta la saciedad las bondades del sistema democrático, pero cuando hay que aplicarlo en su propia casa ya es harina de otro costal. Para llevar a cabo la elección de la nueva directiva del partido, podría haber preparado urnas electorales en sus distintas sedes para que los afiliados, de forma directa y sin intermediarios, pudiesen haber elegido libremente su candidato preferido. En vez de aplicar este método, recurrió al procedimiento fraudulento de los compromisarios, previa visita por todas las provincias para asegurarse su voto impidiendo la aparición de candidaturas alternativas, aunque públicamente manifestase su deseo acerca de la presentación de éstas, que él mismo se había preocupado de anular. Toda una lección democrática para los ciudadanos que descubrimos su ambición y apego al poder, considerando además que cada compromisario representaba todos los votos del partido en su circunscripción. Algo parecido a las elecciones del régimen anterior, tan criticadas y vilipendiadas por los nuevos demócratas.
No contento con ello, inició un proceso de destrucción del partido con el fin de eliminar posibles aspirantes a su puesto, como ya había hecho anteriormente con Rodrigo Rato, Jaime Mayor, Javier Arenas, etc. Comenzó por Cataluña, donde la figura de José Piqué le molestaba por su imagen de modernidad. Le sometió a un proceso de acoso y derribo hasta que consiguió aburrirle y abandonó el partido. Continuó por el País Vasco, donde una dirigente respetada y admirada como Maria San Gil, que se había estado jugando la vida en defensa de unos ideales de libertad, fue empujada a irse por no plegarse a sus ideas y manifestar lo que realmente pensaba: ¡Que no se fiaba de él!
¿Qué ha pasado con Manuel Pizarro? Después de su espectacular fichaje con tintes electorales, ha quedado relegado dentro del partido porque es una mente privilegiada y brillante que ensombrece la figura del presidente.
Actualmente estamos asistiendo a un enfrentamiento con la Unión del Pueblo Navarro que, si Dios no lo remedia, acabará en una fractura en el partido, ante la inflexibilidad de dos individuos (Miguel Sanz y Mariano Rajoy) que anteponen su soberbia e interés personal a cualquier solución pactada y no son capaces de ver la trascendencia de sus decisiones, que sin duda afectarán a España. El resultado de las elecciones autonómicas del año 2007 en la Comunidad Foral de Navarra, exigía la adopción de medidas drásticas por parte del PP, como pudieran ser la celebración de nuevas elecciones en esa Comunidad o la firma de un pacto de legislatura con el PSOE. En su lugar, se optó por la pasividad y con la promesa de apoyo al partido más votado que, evidentemente, fue una jugada del partido socialista ante la proximidad de las elecciones generales, se inició una legislatura en precario y a merced de los intereses del partido socialista. Ahora vienen las consecuencias de la ineptitud pasada.
¿Cuál será la próxima Comunidad Autónoma donde meterá la mano? Me atrevo a decir que la candidata con más posibilidades es la de Madrid, porque su presidenta le está haciendo mucha sombra y supone un serio peligro para su permanencia.
Todo este proceso de descomposición es observado con placer por el partido socialista que puede preparar un programa de gobierno para quince o veinte años con la ayuda indirecta del presidente del partido popular.

La segunda incongruencia está ligada a la grave crisis económica que padece el mundo occidental como consecuencia de un comportamiento criticable de las entidades financieras americanas seguido por las europeas. En mi opinión personal y una vez que ha estallado con toda su crudeza, no es el momento de analizar y buscar culpables sino al contrario, el de adoptar las medidas que los expertos consideran imprescindibles para afrontar el problema. En esta línea, los gobiernos europeos, independientemente de su ideología, se han puesto a trabajar para intentar atajar los dos problemas básicos de la crisis, como son la falta de liquidez de las entidades financieras y la desconfianza existente entre las mismas. El gobierno español ha aprobado un conjunto de medidas, en línea con sus homólogos europeos, para fortalecer el sistema financiero español. Pues bien, el Sr. Rajoy, ante el asombro general, manifiesta que las apoya pero si se aceptan sus condiciones, alegando su preocupación porque ese dinero llegue a las familias y a las PYMES. Me gustaría decirle que el principal negocio de la banca comercial consiste en prestar dinero. Por tanto si la banca tiene liquidez, ese dinero llegará a las familias y a las empresas, en forma de crédito, para que lleven adelante sus proyectos. Lamento que su equipo económico no le asesore debidamente, aunque me inclino a pensar que es la estrechez de sus “entendederas” lo que le impide asimilar el problema.
Es decir, el mundo al revés; un partido de izquierdas en el gobierno apoya a la banca y un partido de derechas, en la oposición critica que el dinero vaya para las entidades financieras. Esta postura, incomprensible para los ciudadanos, pasará a los anales del disparate. La pregunta que me planteo para intentar explicar la situación, es si se trata de ignorancia o simplemente de populismo demagógico. La realidad es que, gratuitamente, se enfrenta a sus aliados naturales que son los banqueros.
Directamente relacionado con este tema están los Presupuestos Generales del Estado para el año 2009. El partido popular ha manifestado su rechazo a la totalidad y así votará en el Congreso de los Diputados. Esta postura representa dejar en manos de un partido fascista y antiespañol, como es el PNV, la aprobación de los mismos mediante el pago del correspondiente peaje. ¿Ha sopesado el Sr. Rajoy esta realidad? Será difícil explicar a los ciudadanos que esa postura va a permitir que el PNV disponga de más recursos para seguir atacando a España. En política hay que ser flexible y saber adoptar en cada momento la posición más pragmática, que en muchos casos no será la más correcta, pero sí la indicada para defender los intereses de la nación.
El Sr. Rajoy no es consciente de que el Presidente del Gobierno le maneja como una marioneta de feria. Comportamiento que se pone de manifiesto cuando surge un tema importante, como es la actual crisis. Previamente se reúne con todos los estamentos económicos y mediáticos del país y cuando la decisión está tomada, le cita en La Moncloa para cubrir un expediente. ¡Que penoso resulta comprobar esta realidad!

Siguiendo en esta línea de desatinos, en tercer lugar, nos encontramos con la política lingüística de algunas comunidades autónomas, que sin duda están llevando a un empobrecimiento cultural de su juventud, pues aunque hablen el castellano, no dominarán esta lengua con lo que sus posibilidades profesionales y culturales se verán muy mermadas en el futuro. Por cierto, el Sr. Montilla, Presidente de la Generalidad de Cataluña, educa a sus hijos en el Colegio Alemán, en el que se imparte una hora semanal de catalán. El partido popular critica esta política ante la opinión pública pero su máximo dirigente permite que en la Comunidad Valenciana, en la que gobierna con mayoría absoluta, se aplique la misma inmersión lingüística. Ante esta situación, los ciudadanos nos preguntamos ¿los discursos y las actuaciones de este partido son coherentes? Un refrán castellano dice que “el movimiento se demuestra andando” pero el Sr. Rajoy, ejerciendo de gallego, aplica el principio de que la mano derecha no sepa lo que hace la mano izquierda y así le va.

En cuarto lugar se encuentran las lamentables declaraciones con las que nos sorprende muy a menudo el presidente del partido popular, que normalmente requieren la inmediata intervención posterior de alguno de sus colaboradores para apagar el fuego. Pero la que ha superado el listón es la célebre frase de “mañana tengo el coñazo del desfile militar”, que habrá hecho las delicias de los antisistema.
El Sr. Rajoy no debe conocer que todas las naciones, independientemente de su ideología gobernante, celebran un día al año un homenaje a sus fuerzas armadas y que el acto más importante para los militares es el desfile que discurre por las calles de una gran ciudad. Que duda cabe que este evento produce inconvenientes a los ciudadanos y en especial a los pobres soldados que se pasan muchos días trabajando a destajo para que todo salga bien. He aquí que D. Mariano asume como “coñazo” tener que permanecer dos horas en una tribuna, cómodamente instalado, viendo como pasan las tropas. Verdaderamente es un trabajo durísimo si lo comparamos con las ocho horas diarias que tienen que trabajar el resto de los ciudadanos para sobrevivir y, en la mayoría de los casos, en condiciones más penosas. Me imagino cómo habrá sentado la célebre frase en el estamento militar. Como antes mencionaba con la banca, se ha granjeado gratuitamente la enemistad de un sector votante habitual del partido popular.
Puestos a suavizar este desliz que, en mi opinión, no es disculpable porque refleja realmente cual es su pensamiento y la ligereza de sus manifestaciones, lo que debería haber hecho, como responsable político, es salir el día siguiente en los medios de comunicación pidiendo disculpas a las fuerzas armadas por una frase tan desafortunada, pero su soberbia o cobardía le impiden dar este paso. Ambos supuestos, le descalifican como persona y como líder de un partido de derechas.
Es curioso observar como sus adversarios políticos le echan un capote y no arremeten contra él, lo que significa que están muy satisfechos de su comportamiento.

A la vista de lo relatado en estas líneas, me viene a la memoria el proceso seguido por Adolfo Suárez en la segunda parte de su mandato. Se enfrentó primero a la banca, posteriormente al ejército, luego a la iglesia y finalmente destruyó la UCD con su política errática. En este caso, el Sr. Rajoy sigue sus pasos, aunque de momento se apoya en la iglesia que es el peor aliado que ha podido buscar si pretende alcanzar el poder. Igualmente está llevando a su partido a una situación que será difícil recomponer cuando tenga que abandonar su cargo que a su pesar sucederá antes o después; eso sí, llevándose por delante a todo el que pueda.
Creo que con las actuaciones aquí descritas, el Sr. Rajoy ha perdido la escasa credibilidad que tenía y si de verdad sintiese por España una décima parte de lo que predica, haría las maletas y se retiraría al Registro de la Propiedad de Lugo donde, sin duda, realizaría un buen trabajo.
Como esta solución la contemplo inviable a corto plazo, dada su ambición, me dedicaré a seguir sus tropezones políticos que, si los interpretamos en clave de humor, serían para morirse de risa de no estar en juego algo tan importante como es el futuro de un partido que presume de ser la alternativa al partido socialista.



Madrid, 15 de octubre de 2008